El muslo fresco utilizado para la producción de nuestros jamones cocidos se compra con hueso y se deshuesa a mano internamente para obtener unos cortes perfectos y controlarlo de manera atenta. Después de la mezcla con sal, especias, aromas naturales y nuestra infusión secreta (una antigua receta familiar a base de hierbas aromáticas), así como un masaje lento para que la absorban lo mejor posible, se realiza una cocción al vapor muy lenta que le aporta el típico color rosa y su olor embriagador. En los últimos años, nuestra familia ha invertido mucho en la compra de las tecnologías más avanzadas para producir productos cocidos cada vez más innovadores y complementar las referencias más clásicas, como los productos cocidos de alta calidad y la selección de muslo entero con piel ideales para la charcutería tradicional.